En el marco de la celebración del 199° aniversario de El Cerrito, el Concejo de este municipio otorgó un reconocimiento a Providencia, empresa líder en la agroindustria de la caña en Colombia, destacando su contribución al desarrollo sostenible, económico y social de la región. Esta distinción resalta el rol fundamental de la compañía como motor de crecimiento en el sector agrícola e industrial del municipio.
El Cerrito, conocido como “Ciudad Cariño”, ha sido testimonio de casi de dos siglos de progreso, donde Providencia, con cerca de 100 años de historia, ha cumplido un papel esencial. La empresa se ha consolidado como un símbolo de dulzura sostenible y compromiso con el bienestar de la región, mediante la generación de empleo de calidad, aportando a la economía del municipio.
“En este 199° aniversario, recordemos con gratitud el camino recorrido y, con especial énfasis, el papel que Providencia ha jugado en nuestra historia reciente. Renovemos nuestro compromiso de trabajar juntos para un futuro lleno de oportunidades, donde la dulzura sostenible siga siendo el eje de un desarrollo equilibrado y en armonía con el entorno”, mencionó César Tulio Martínez, presidente del Concejo Municipal de El Cerrito.
“Nuestro compromiso con El Cerrito y el Valle del Cauca transciende lo económico: buscamos ser un motor de desarrollo sostenible y bienestar para las actuales y futuras generaciones. Este reconocimiento refleja nuestro compromiso con la zona de influencia en la que operamos. Seguiremos trabajando con responsabilidad, preservando el legado ambiental y social de esta región”, afirmó Vicente Borrero, gerente general de Providencia.
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Sobre Providencia:
Por casi 100 años Providencia ha entrelazado la naturaleza, la educación y el desarrollo económico para dejarle a las próximas generaciones un lugar para vivir; su gestión en lo social, ambiental y económico le permiten catalogarse como una empresa de triple impacto. En 1991 el Ingenio pasó a formar parte de la Organización Ardila Lülle, incorporando grandes avances tecnológicos y diferentes cambios en su estructura organizacional.
Su componente social es la educación de calidad. Gracias a sus programas son beneficiadas 4.000 personas al año con educación básica y media, formación tecnológica, primera infancia (Providencia Centro de Formación Integral), fomento al deporte, entre otros.
Desde la gestión ambiental, trabaja en la creación de fuentes energéticas renovables derivadas del ejercicio agrícola, actividad que cuenta con la certificación internacional Bonsucro que acredita el cumplimiento de los estándares en la fabricación sostenible de azúcar y alcohol. Así como la protección y preservación del agua, la biodiversidad y los ecosistemas frágiles amenazados, a través de Providencia Parque Ecológico Providencia.
En el ámbito económico se materializan los esfuerzos en la producción de azúcar, así como bioetanol, energía eléctrica renovable y compost orgánico, entre otros, generando 3,640 empleos directos. Por usar la fuerza del mercado para dar soluciones concretas a problemáticas sociales y ambientales, Providencia es certificada como Empresa B.
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