El secretario de Salud del Atlántico, Armando De la Hoz Berdugo, informó que la Gobernación ha socializado con los gerentes de los hospitales municipales y departamentales los alcances de la guía de atención que forma parte de la Ruta.
"Este programa nos permite, por ejemplo, saber cómo se va a priorizar la atención a las maternas, hacer la formulación de los movimientos de las diferentes patologías que presentan las mujeres embarazadas para poder actuar de manera oportuna, y hacer los traslados que corresponden a niveles de complejidad superior", explicó De la Hoz Berdugo.
A partir de la identificación y evaluación de los riesgos biológicos y psicosociales, el diagnóstico y tratamiento oportuno de alteraciones que afecten la gestación, e información para que la mujer tome decisiones en relación con la planeación de la gestación, se busca disminuir los casos de muertes maternas, que en 2018 llegaron a 15 en el Atlántico.
Armando De la Hoz Berdugo y los subsecretarios de Salud Pública, Arilis Ruiz Medina, y de Seguridad Social, Hernando Viloria Eljach, lideraron la agenda y explicaron los alcances de la Ruta.
El funcionario indicó que hay un proceso de capacitación importante con todos los gerentes, los equipos médicos asistenciales y especialistas, pediatras y gineco-obstetras de los hospitales de segundo nivel que hacen parte de la Ruta, como son el Niño Jesús y el Juan Domínguez Romero de Soledad y el departamental de Sabanalarga, que han sido escogidos como puntos de captación de estos pacientes, y por supuesto el nivel superior de alta complejidad que en este caso sería el hospital ESE Cari.
PASOS DE LA RUTA
Dentro de la Ruta de Atención Integral Materno Perinatal, se busca cumplir cuatro pasos obligatorios: la atención preconcepcional, el control prenatal, la atención del parto y la atención del recién nacido.
En los dos primeros, se hace una evaluación del riesgo preconcepcional y se brinda asesoría y provisión de un método anticonceptivo, de acuerdo a los criterios de elegibilidad y el deseo de la mujer. Esto se logra por medio de una consulta inicial y un control en los que se registran los antecedentes personales, gineco-obstétricos y hábitos de la paciente, además de la práctica una valoración integral mediante un examen físico completo y una valoración psicosocial.
La segunda etapa del proceso incluye el control prenatal, donde se vigila la evolución del proceso de la gestación, a fin de identificar precozmente a la gestante con factores de riesgo biopsicosociales, enfermedades asociadas y propias del embarazo para un manejo adecuado y oportuno.
En esta etapa se establece la condición de salud de la gestante y se toman decisiones que garanticen su manejo de acuerdo, dentro de la complejidad en los diferentes niveles de atención del sistema de salud, para así llevar a buen término el embarazo.
Las dos etapas finales son: la atención del parto y el recién nacido. En estas se brinda un acompañamiento a la gestante y su familia, a fin de obtener una experiencia humanizada y basada en el enfoque de derechos.
El funcionario destacó que, ante las cifras de muertes maternas del año anterior, se inició un trabajo cercano con las adolescentes en las instituciones educativas del departamento para disminuir el número de embarazos, y canalizar los casos con las diferentes líneas de Salud Pública, orientados con el fortalecimiento de la familia, integrando valores y generando protección a los menores.
Atlántico es líder en el país en la implementación del programa Familias Fuertes, que ha demostrado con efectividad la reducción del consumo de drogas, el delito y otros comportamientos de riesgo por parte de la juventud como el suicidio y los embarazos a temprana edad.
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