Ante la presencia del caracol gigante africano en el municipio, el Establecimiento de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente de Soledad, Edumas, hace un llamado a la comunidad para que aplique medidas de prevención y explica paso a paso cómo identificar esta especie y cuál es el protocolo de manejo y erradicación.
Clerk Pertuz, subgerente ambiental del Edumas, indica que “los podemos identificar por su concha que puede medir de 25 a 30 centímetros de longitud y 8 centímetros de alto; son de color marrón y tienen líneas longitudinales grandes e irregulares de color violeta oscuro. Aunque es una especie vegetariana, puede comer prácticamente de todo, incluido excrementos”.
El caracol gigante africano es una de las cien especies exóticas invasoras más dañinas del mundo, reconocida a nivel mundial como plaga que afecta la biodiversidad, la salud pública y la productividad agrícola de un país.
Esta especie por lo general suele ser vista inmediatamente después de la lluvia y tiene hábitos nocturnos. Prefiere los sitios húmedos y sombríos como debajo de piedras, bloques, restos de cosechas, basuras, arbustos y hojas secas en descomposición.
A través de su baba, este caracol causa graves enfermedades en el sistema nervioso, pues transmite parásitos y bacterias que pueden causar la muerte a personas o animales, es por ello que se recomienda no tocarlos sin protección.
Ante tal situación, hacemos un llamado a la comunidad a estar alerta e informar la presencia de este molusco, llamando al PBX del Edumas 605-3930976 de lunes a viernes y a la Oficina de Salud Pública de Soledad, 3282996 y 3922932, para evitar que el contacto con el animal represente un riesgo para los miembros de la familia.
En caso contrario que puedan recolectarlos para evitar que se pierdan o alojen en un sitio inalcanzable, se recomienda el uso de guantes, depositarlos en un recipiente con cal o arena y trasladarlos hasta un sitio lejano de fuentes hídricas, personas y animales; cavar un hueco en la tierra de más de cincuenta centímetros de profundidad, depositarlos y proceder a taparlos con tierra y cal. Seguidamente, notificar su ubicación a las autoridades tales como el Edumas, la Secretaría de Salud de Soledad, la Oficina de Salud Pública, la Secretaría de Salud del Atlántico o a la Corporación Regional Autónoma, CRA, para tomar las medidas pertinentes.
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