La reflexión es que pasamos de un vaso que estaba quebrado, a un vaso que se puede ver medio lleno o medio vacío, pero que invitamos que se siga llenando porque el vaso cada vez tiene que ser más grande y cada vez soñamos con una mejor ciudad. Y en Barranquilla se ha hecho mucho, pero falta mucho por hacer”.
Con esa afirmación, el ex gerente de Ciudad, Carlos Acosta Juliao, resumió ante los medios de comunicación de la ciudad el camino que ha recorrido Barranquilla en los últimos años.
“Barranquilla pasó de ser esa ciudad próspera en los años 20 a estar quebrada, a perder su esperanza; y llegó un proceso que arrancó con Alejandro Char, a empezar a creer que sí se podía y a salir adelante, y hoy es un modelo que es reconocido no solamente a nivel nacional, sino a nivel Latinoamérica y a nivel internacional”, agregó.
Uno de los grandes desafíos de la ciudad es continuar incluyendo a los jóvenes en la oferta educativa y laboral.
“Me gustaría enfocarme en una propuesta, que los jóvenes pasen de ‘nini’ a ‘sisi’, jóvenes que ni estudian ni trabajan, a jóvenes que sí estudian y sí trabajan. Hace 14 años había 60 mil niños que no estaban en el sistema escolar, ya hay una cobertura universal, pero esos niños se gradúan del colegio y ahora están buscando qué hacer. Son más de 70 mil jóvenes que no estudian y no trabajan, y hay que lograr que esos jóvenes sí estudien y sí trabajen”.
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