El subsecretario de Participación Ciudadana y Convivencia, Edgardo Mendoza, manifestó que con estos espacios de reflexión se busca que los atlanticenses construyan un territorio de paz donde prime la cultura, el derecho y el respeto a los demás.
Desarmamos la intolerancia con un nuevo lenguaje en las redes sociales, en el trato con los demás, en el trato día a día. Cuando respetamos el derecho a los demás empezamos a construir paz y lo que buscamos es que llegue a todo el territorio del Atlántico”, dijo el funcionario.
Para la jefe de Coordinación de Terreno de la misión de Verificación de las Naciones Unidas en Colombia, Carolyne-Mélanie Régimbal, el desarme cumple un rol vital en la construcción de la paz. “Es una de las herramientas más fuertes que tenemos como sociedad y como gobierno para mandar un mensaje permanente de paz”.Agregó que la intolerancia se desarma paso a paso y es un proceso que debe venir desde la familia, la educación y las comunidades.
El modelo tripartito que se implementó después de la firma de los acuerdos, tanto en el proceso de cese al fuego como en el proceso de dejación de armas, es un modelo que podemos repetir, y un compromiso de todas las partes para avanzar con los nuevos retos que son los de la reincorporación y de las garantías de seguridad.
Ese esquema de colaboración nos sirve para reducir la intolerancia”, afirmó Régimbal.
El foro Desármate de la Intolerancia contó con un panel de artistas que compartieron sus conceptos y experiencias con el arte como herramienta para sanar heridas y afianzar lazos de convivencia.
Participaron como panelistas, César López, reconocido músico colombiano, creador de la escopetarra, símbolo social que representa la posibilidad de transformación de comportamientos negativos y destructivos en hechos positivos que construyen, reconcilian y sanan; Aida Bossa, actriz de teatro y televisión con formación musical, protagonista de la serie “La Niña Emilia”; Alfonso Mendoza, cantante venezolano de rap más conocido como ‘ALCA’; y José Carlos Máría (IUSEF), compositor, director musical y arreglista.En el diálogo con estos artistas, moderado por el comunicador social y periodista, investigador y consultor, Alberto Martínez Monterrosa, se estableció que son múltiples los aportes del arte a la construcción de paz.Con el arte reconstruimos memoria porque en la obra artística se plasman eventos de la historia que nos ayudan a entenderlos y sanar. También ayuda a educar a una generación de niños para que no repitan la historia y a tender puentes entre la gente que no se quiere. Termina siendo esa autopista por la que pueden pasar las dos partes”, sostuvo César López.La editora de Semana Rural, Bibiana Mercado Rivas, indicó que el desarme de la intolerancia es trabajar sobre las realidades para desbaratar mitos y tabús, es dejar de pensar que solamente a través de los casos exitosos es que hacemos país.
Como medios de comunicación tenemos un intangible que es la generación de contenidos y de información, hechos con calidad, de forma rigurosa, con investigación y contrastación de fuentes. Con este trabajo acercamos a la ciudad y al campo en la información”.
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