Las Iglesias se salvaran de impuestos si invierten sus recursos en obras filantrópicas.
La redacción del texto de la Reforma Tributaria que será votado por las plenarias de Cámara y Senado contempla cárcel para los evasores de impuestos.
Así quedó definido tras una reunión del presidente Petro con los congresistas.
La idea es penalizar a quienes evadan más de 1.000 millones de pesos en impuestos, contrario a la norma actual que sanciona la evasión que supera los cinco mil millones.
“Se extingue la pena si se paga la primera vez, si la segunda vez ocurre nuevamente una evasión la pena se extingue solo en un 50% y ya la tercera vez la pena no se extingue", explicó el senador conservador Efraín Cepeda.
Otro punto definido en el acuerdo tiene que ver con las zonas francas. Pagarán un impuesto de 20 por ciento sobre las utilidades por sus exportaciones o por las ventas a ciudadanos extranjeros, y las ventas al mercado pagarán el 35 por ciento.
El nuevo esquema indica que nunca perderán la condición de Zona Franca, y podrán seguir importando equipos y maquinaria sin aranceles o pagando los que ya importaron sin problema.
El tercer definido está relacionado con los impuestos a las profesiones liberales: abogados, arquitectos, periodistas o cualquiera que haga consultorías.
La idea inicial era dejarlos por fuera del Régimen Simple, pero ahora podrán quedarse si sus ingresos anuales están por debajo de los 500 millones de pesos. Antes de la reforma eran 4 mil millones anuales.
Finalmente hay un principio de acuerdo sobre el futuro del impuesto a las iglesias: La utilidades de esas instituciones si las aplican a su propio objeto social, es decir el culto, a labores filantrópicas, o se aplican en obras meritorias para la comunidad tendrán un beneficio tributario. Pero sí los excedentes se van para otras cosas diferentes como compra de locales, apartamentos, o vehículos, serán gravables.
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