Aroca Saad fue asesinado ayer por dos sicarios, cuando se encontraba haciendo su rutina de ejercicios al norte de la ciudad.
“Lamentable todo lo que ha sucedido con el doctor Aroca. Nosotros nos conocemos hace más de 30 años, tuvimos la oportunidad de laborar juntos en el Instituto de Seguro Social donde él se desempeñaba como pediatra y yo como anestesiólogo. Era una persona excelente desde todo el punto de vista profesional, como amigo y pues todos los calificativos positivos que se le pueden dar a un ser humano”, dijo Dilson Caicedo Suárez, médico anestesiólogo.
El cortejo fúnebre fue recibido con una calle de honor realizada por niños y el profesionales de la salud, quienes sostenían flores en sus manos, a las afueras de la Iglesia Inmaculada Concepción, donde se realizó la eucaristía.
Al sepelio asistieron personalidades de la música vallenata, amigos, compañeros de trabajo, familiares, miembros de las autoridades gubernamentales, de las Estaciones de Servicio y pacientes de Alberto Aroca, quienes en medio de la tristeza e inconformidad le dieron el último adiós.
“Desde muy temprano de mi vida he sido amigo de la familia del doctor Alberto Aroca, una de las personas que me inspiró a ser médico, indudablemente un gran médico, una gran persona, empresario. Hemos perdido un baluarte aquí en Valledupar. En todos los campos fue un ser excepcional”, dijo Guillermo Girón, médico cirujano.
Por su parte, el cantante Jorge Oñate también lamentó el fallecimiento del galeno.
“Es lamentable y delicado lo que está sucediendo en nuestro departamento. La inseguridad en todas partes y además un gran médico que veía por los niños, que es lo más querido. Realmente, pues perdimos un médico muy grande y es un caso delicado en nuestro departamento. Están pasando cosas muy delicadas”,
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