La ciudad vivirá un frenesí desde la mañana cuando la gente salga a trabajar y otros más vayan a hacer compras. De hecho, en el Centro de Barranquilla, habrá un gran madrugón de ofertas.
Los barranquilleros saldrán a comprar la ropa de esta noche. Los niños estrenarán y encenderán las velitas en los faroles, otra de las tradiciones de este 7 de diciembre.
La capital del Atlántico estará desbordada. La gente en las calles, la movilidad congestionada y la camiseta rojiblanca en cada esquina de Barranquilla.
La décima del Junior es una ilusión que, con el paso de las horas, generará ansiedad. El equipo 'Tiburón' disputa un título un 7 de diciembre, algo poco antes visto.
Los faroles alusivos al conjunto rojiblanco dirán presente, sin lugar a dudas. En cada esquina los estarán vendiendo.
El frenesí seguirá hasta la tarde y los estaderos, discotecas, restaurantes y el estadio Metropolitano Roberto Meléndez abrirán sus puertas, desde la 1 de la tarde, para recibir a los hinchas rojiblancos.
El partido inicia a las 4 de la tarde. En Barranquilla se vivirá una locura. Las empresas cerrarán sus instalaciones tempranos y todos los ojos de los ciudadanos estarán puestos en el televisor.
Apoyo desde la distancia a un equipo que solo le ha brindado alegrías a la ciudad en el último año. El tricampeonato está en disputa y hay garantía de carácter por parte de los jugadores de Junior.
Las autoridades activarán su plan de seguridad desde la tarde de este sábado. Muchos estarán viendo el partido, pero otros seguirán en centro comerciales comprando comida y ropa para la noche.
A las 6 y media de la tarde, aproximadamente se estará conociendo el resultado de la final entre Junior y América de Cali. Un nuevo título para el equipo barranquillero encendería la fiesta y por partida doble.
Las autoridades activaron el plan de contingencia en contra del uso de la pólvora, para evitar quemados. Además, policías estarán al pendiente de algún otro tipo de alteración de orden público.
El resultado del partido marcará el ánimo de los barranquilleros en la noche. Eso es indudable. Ojalá y la 'Noche de Velitas' se encienda la décima estrella.
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