Luego del asesinato de su madre, Dayana Santoyo Martínez de 30 años de edad, la adolescente justificó la ausencia señalando que su progenitora se había ido de viaje y que desconocía cuándo regresaría.
Sin embargo, detectives alertados sobre la sospechosa ausencia de Santoyo Martínez, iniciaron las investigaciones y lograron determinar que un hombre de 21 años, quien sostenía una relación sentimental con la menor y una tercera persona participaron directamente en la desaparición.
Luego de las pesquisas de rigor se logró la detención de Ricky Rivera de 21 años de edad, quien terminó confesando que él junto al sujeto identificado sólo como Junior, y la menor sostuvieron una discusión con Dayana Santoyo, cuando la mujer llegó a su casa y los corrió, luego dijo que se mudaría, llevándose consigo todos sus muebles y electrodomésticos.
La mujer, quien se desempeñaba como auxiliar de veterinaria, se fue a dormir junto a su otro hijo de 11 meses y fue cuando la menor ordenó el crimen, era la noche del 10 de septiembre.
Los dos detenidos confirmaron lo que los vecinos contaban: tras la discusión aprovecharon que la mujer dormía y la estrangularon.
La joven quería que también mataran a su hermano para no levantar sospechas del supuesto viaje de Dayana.
Tras el crimen, ocultaron el cadáver lanzándolo a un pozo séptico, encima arrojaron arena, ropa y basura que encontraron en el patio de la casa.
La joven habría sugerido que mataran a un perro y lo lanzaran en el mismo pozo con el cuerpo de su madre para disimular el mal olor.
El hombre de 21 años y la adolescente fueron detenidos, el tercer implicado se encuentra fugado.
Debido a su edad, la menor es inimputable, por lo que las autoridades buscan a sus familiares para entregarles su custodia, al parecer nadie quiere recibirla, luego de lo ocurrido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario